José María MOSCOSO DE ALTAMIRA, Conde de Fontao (Mondoñedo, Lugo, 1788 - Madrid, 1854).

José María GALVÁN y CANDELA (1837-1899)
- Óleo sobre lienzo -
100 x 75 cm

Al Conde de Fontao, José María Moscoso de Altamira, nacido en 1784, le cabe la honra de haber sido el primer Presidente del Senado, institución creada, junto con el Congreso, por la Constitución de 1837, consagrando el sistema bicameral en España en sustitución de la Cámara de los Próceres y la de los Procuradores contempladas en el Estatuto Real de 1834. El  Conde de Fontao ocupó dos veces la Presidencia del Senado, en las Legislaturas de 1837-1840 y 1844-1845. Fue también dos veces Ministro de Gobernación en 1823 y 1834.

El autor del retrato, José María Galván y Candela, nació en 1837 en Madrid, si bien algunos autores lo consideran valenciano. Se formó en la Escuela Especial de Pintura y Escultura de la Academia de San Fernando, simultaneando la pintura y el grabado. Campo este último en el que terminará por especializarse, obteniendo repetidos éxitos en las Exposiciones Nacionales: tercera medalla en 1867, segunda en 1876 y 1878 y primero en 1897, dos años antes de su muerte. Colabora además en distintas revistas como El Arte en España, e incluso con empresas como la Confederación Hidrográfica, de la que fue grabador oficial desde 1866.

Practica también la pintura, especialmente la religiosa y el retrato, aunque alcanza bastantes menos éxitos con una única presencia en los certámenes, en 1881 con cuatro retratos. Salvo alguna crítica pasaron completamente inadvertidos. No obstante trabajó ocasionalmente para la Junta de Iconografía Nacional y asiduamente para el Senado, cuya Galería de Retratos cuenta con siete Presidentes salidos de sus pinceles, uno del Rey Alfonso XII y siete personajes históricos. En la ejecución de estos retratos Galván cuenta con una dificultad especial pues, por tratarse de retratos póstumos en su mayoría, son copias o están recreados de otros modelos. En consecuencia, su trabajo se limita a la ejecución. Es el caso de los Condes de Fontao o Almodóvar que presentan una rigidez y dureza achacables en buena medida al modelo original, que para el Conde de Almodóvar fue proporcionado por un nieto suyo.