I PLAN DE SOSTENIBILIDAD DEL SENADO

Última revisión 08/04/2024

 

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INTRODUCCIÓN

La aplicación de estándares de gestión sostenible constituye una herramienta esencial para la consecución de los objetivos relacionados con la utilización responsable y eficiente de los recursos y la reducción del impacto medioambiental, recogidos en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, aprobada por Resolución de la Asamblea General de las Naciones Unidas el 25 de septiembre de 2015.

A través de la aprobación del I Plan Estratégico de Gestión Sostenible, el Senado manifiesta su compromiso con el medio ambiente y su propósito de contribuir al cumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenible, objetivos que han estado presentes durante la última década en la adopción por la Mesa de la Cámara de numerosas medidas relacionadas con la sostenibilidad ambiental. Con el propósito de seguir avanzando en la consecución de este objetivo, la Mesa del Senado, en su reunión del día 4 de febrero de 2020, acordó encargar a la Secretaría General la elaboración de un plan de gestión medioambiental sostenible de los edificios del Senado en el que se identifiquen los aspectos que se pueden mejorar durante todo su ciclo de vida y se coordine la acción de las diferentes Direcciones del Senado implicadas en la gestión del edificio, así como en el ámbito de contratación pública de la Cámara mediante la inclusión de nuevas cláusulas medioambientales con respeto, en todo caso, a los principios de eficiencia en el gasto, igualdad de trato, no discriminación, transparencia y proporcionalidad.

El presente Plan Estratégico de Gestión Sostenible del Senado propone medidas estructuradas en tres apartados: sostenibilidad de los edificios, contratación pública ecológica y compromiso social.

El primero, relativo a la sostenibilidad de los edificios, analiza el impacto ambiental de los edificios del Senado de conformidad con los criterios establecidos en las herramientas para la evaluación y certificación ambiental con mayor implantación en España y con arreglo a cinco categorías o áreas de actuación: energía y atmósfera, agua, materiales y residuos, calidad del ambiente interior y transporte. Para cada categoría se ha realizado un diagnóstico, que recoge las actuaciones ya adoptadas en el Senado y las medidas que los sistemas de certificación valoran como requisito medioambiental, incluyendo también las normas que resultan de aplicación. Por último, se vinculan los criterios ambientales de cada categoría a determinados objetivos e indicadores de impacto ambiental y se proponen actuaciones con el propósito de alcanzar de forma gradual las mejores prácticas en cada ámbito.

El apartado relativo a la contratación pública ecológica propone, tras el estudio de la situación actual, la elaboración de recomendaciones sobre la inclusión de cláusulas medioambientales en los procedimientos de licitación de la Cámara. Para la redacción de este apartado se han tenido en cuenta no solo los criterios de la Comisión Europea en materia de contratación pública ecológica de los bienes, obras y servicios, sino también los requisitos ambientales valorados por las herramientas de sostenibilidad estudiadas y en el Plan de Contratación Pública Ecológica 2018-2025 de la Administración General del Estado, sus organismos autónomos y las entidades gestoras de la Seguridad Social, aprobado por Acuerdo del Consejo de Ministros de 7 de diciembre de 2018.

El apartado "compromiso social" aborda las actuaciones que realizará el Senado con el propósito de extender la cultura y concienciación medioambiental mediante la implicación de su personal en la transición ecológica, el establecimiento de una estrategia de comunicación para poner en valor el papel ejemplarizante y educador de las prácticas sostenibles y la promoción de la colaboración internacional.

Por último, el I Plan Estratégico de Gestión Sostenible del Senado, con el objeto de garantizar su eficacia y permitir su constante adaptación a las nuevas necesidades que se detecten, contempla el seguimiento de su implantación y la evaluación periódica de los resultados obtenidos.

A. SOSTENIBILIDAD DE LOS EDIFICIOS

El objetivo de este apartado es propiciar en el Senado un entorno construido sostenible de carácter integral que contribuya a la reducción del impacto medioambiental derivado de la infraestructura y de los servicios y suministros que sirven de apoyo a la actividad parlamentaria y administrativa.

Debido a la complejidad del concepto de sostenibilidad, en los últimos años la organización internacional para la estandarización (ISO, representada en España por el organismo de normalización UNE) ha desarrollado diversas normas técnicas para cuantificar los índices de sostenibilidad en la edificación. Estas normas, de carácter voluntario, intentan englobar todos los aspectos de la sostenibilidad y son mucho más completas que las disposiciones legales y reglamentarias vigentes en la materia.

A raíz de dichas normas ISO/UNE han surgido una serie de herramientas que cuantifican la sostenibilidad de un proyecto o edificio y que son conocidas como sistemas de calificación y certificación ambiental. En España son dos los sistemas de certificación ambiental con mayor implantación: BREEAM-ES y VERDE. BREEAM es el sistema con mayor difusión en la UE. Fue desarrollado por el organismo británico BRE (Building Research Establishment) y su adaptación y gestión en España se lleva a cabo por el Instituto Tecnológico de Galicia. VERDE, de implantación exclusiva en España, es una herramienta desarrollada por el Green Building Council España (GBCe) para el mercado local. En el ámbito de la Unión Europea también cabe mencionar el sistema alemán DGNB (Deutsche Gesellschaft für Nachhaltiges Bauen), adaptado a finales de 2019 al mercado español por el GBCe.

Estos sistemas asignan criterios de sostenibilidad a cada una de las etapas del ciclo de vida de un edificio (diseño, construcción, uso y deconstrucción). Algunos ejemplos de criterio de sostenibilidad son el consumo de energía, el impacto de los materiales de construcción o la clasificación de residuos urbanos. Para hacer operativa la evaluación de cada criterio es necesario asociar cada uno de ellos con uno o más impactos y el indicador que suministra un valor numérico y su unidad de medida (por ejemplo: kilovatios-hora, emisiones equivalentes de CO2 de los materiales de construcción o kilogramos de residuos reciclados). Es por ello conveniente contar con sistemas de monitorización y de registro de datos relacionados con cada criterio de sostenibilidad.

Los criterios se estructuran en categorías o áreas de actuación. Dado que las categorías propuestas por los diferentes sistemas de evaluación tienen por objeto abarcar todo tipo de edificios y actividad, el presente plan propone una clasificación más ajustada a los potenciales impactos ambientales del Senado, derivados de las características del edificio y de la organización y el funcionamiento de la Cámara: energía y atmósfera, agua, materiales y residuos, calidad del ambiente interior y transporte.

Para cada categoría se incluye un diagnóstico y se proponen criterios, objetivos y medidas determinados. El diagnóstico incluye las normas que resultan de aplicación y recoge las medidas principales de sostenibilidad ya adoptadas por el Senado. Los criterios, objetivos y medidas tienen el propósito de alcanzar de forma gradual las mejores prácticas en cada área de actuación. Asimismo, se han establecido indicadores de impacto ambiental que permiten valorar los avances obtenidos como consecuencia de la implementación del plan.

CATEGORÍA 1: ENERGÍA Y ATMÓSFERA

Diagnóstico

Los edificios son responsables del 40% del consumo energético global y, en consecuencia, revisten una vital importancia para alcanzar el compromiso europeo de un sistema energético sostenible y descarbonizado. La mejora de la eficiencia energética de los edificios será determinante para el objetivo de conseguir en 2050 la neutralidad en emisiones de carbono establecido en el Pacto Verde Europeo y, en el ámbito nacional, en la Ley de cambio climático y transición energética.

La Directiva 2010/31/UE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 19 de mayo de 2010, relativa a la eficiencia energética de los edificios (EPBD: Energy Performance of Buildings Directive), modificada por la Directiva 2018/844/UE del Parlamento Europeo y del Consejo de 30 de mayo de 2018, es la principal norma europea dirigida a garantizar la sostenibilidad de la edificación en lo referente al consumo energético, la contención de emisiones de gases de efecto invernadero y la generación de energía a partir de fuentes renovables. Uno de los objetivos fundamentales que persigue la EPBD es conseguir que los edificios de nueva construcción tengan un consumo energético casi nulo. Esta norma se ha transpuesto a la legislación española en el Código Técnico de la Edificación y en el Reglamento de Instalaciones Térmicas de Edificios.

Un edificio de consumo energético casi nulo es aquel con un nivel de eficiencia energética muy alto. La cantidad de energía requerida debería estar cubierta, en muy amplia medida, por energía procedente de fuentes renovables, producida in situ o en el entorno. El Código Técnico de la Edificación establece la definición en España de edificio de consumo energético casi nulo como aquel que cumple con las exigencias reglamentarias para edificios de nueva construcción en las diferentes secciones del Documento Básico de Ahorro de Energía (DBHE) que forma parte del citado código. Estas exigencias se refieren a la limitación del consumo y demanda energética a través de actuaciones sobre la envolvente térmica del edificio y sus instalaciones técnicas, así como al establecimiento de una contribución mínima de fuentes de energía renovable.

La última modificación de la EPBD de 30 de mayo 2018 junto a la Recomendación (UE) 2019/1019 de la Comisión, relativa a la modernización de edificios, pone especial énfasis en el importante papel que la monitorización de consumos energéticos y los sistemas de automatización y control juegan en la mejora de la eficiencia energética de los edificios. El Senado realiza la monitorización de los consumos de electricidad desde 2010 y cuenta con un sistema informático de gestión energética de edificios desde 2013 para los sistemas de climatización centralizados. El consumo de energía eléctrica del Senado ha disminuido un 36% en los últimos diez años.

En octubre de 2020 la Comisión Europea, en su comunicación "Oleada de renovación para Europa", anunció la revisión de la EPBD en junio de 2021 en el sentido de la introducción de objetivos mínimos obligatorios de eficiencia energética que deben cumplir edificios existentes. Por lo tanto, la monitorización y medida de los parámetros energéticos del edificio será imprescindible para cumplir las previsiones normativas de los próximos años.

Los cinco sistemas con mayor impacto ambiental en la categoría de energía y atmósfera que se han identificado en el Senado se analizan a continuación. En primer lugar, cada uno de los tres componentes del edificio sobre los que existen exigencias reglamentarias: la envolvente térmica del edificio, las instalaciones técnicas y las energías renovables. A lo anterior se añadirán otros dos sistemas con relevancia en el consumo energético del edificio que, si bien no se encuentran recogidos en la normativa sobre eficiencia energética de edificios, cuentan con estándares de aplicación de carácter voluntario: los sistemas de comunicación mecánicos (ascensores, principalmente) y los centros de procesos de datos. El resto de equipos consumidores de energía eléctrica, incluidos los equipos informáticos, tienen un impacto menor que las instalaciones y sistemas señalados, y se recogen en el presente plan en el apartado correspondiente a la contratación pública ecológica.

Por último, hay que destacar que, además de la envolvente térmica y la eficiencia energética de las instalaciones, equipos y sistemas, el comportamiento de los usuarios es un factor fundamental que influye en la eficiencia energética del edificio y sus emisiones asociadas. Esto se abordará no solo a través del establecimiento de instrucciones o recomendaciones, sino además a través de medidas de concienciación y sensibilización, recogidas en el apartado correspondiente al compromiso social.

1. Envolvente térmica del edificio

La estrategia fundamental para la reducción de la demanda energética de un edificio es la mejora de su envolvente térmica y el valor fundamental que determina su rendimiento es la transmitancia térmica.

La envolvente térmica está compuesta por todos los cerramientos y particiones interiores, incluyendo sus huecos (ventanas, lucernarios, puertas acristaladas) y sus puentes térmicos, que delimitan todos los espacios habitables del edificio. Los puentes térmicos son zonas de la envolvente donde existe una pérdida de uniformidad, que conlleva una minoración de la resistencia térmica con respecto al resto de cerramientos.

Las disposiciones de eficiencia energética sobre la envolvente térmica en edificios existentes tienen carácter obligatorio solo cuando se aplican a grandes actuaciones de reforma (entre otras, aquellas que impliquen una renovación superior al 25% de la envolvente térmica del edificio). Los edificios protegidos, como es el caso del Palacio del Senado, son exceptuados de la norma cuando las exigencias de eficiencia energética pudieran alterar de manera inaceptable su carácter o aspecto.

El criterio seguido por el Senado ha sido la realización de las reformas de eficiencia energética sobre la envolvente de sus edificios a la vez que otras obras necesarias (principalmente, aplicación de materiales aislantes y roturas de puentes térmicos), lo que ha permitido renovaciones económicamente rentables gracias a las economías de escala.

2. Instalaciones técnicas

La directiva EPBD define como instalaciones técnicas del edificio al conjunto de instalaciones térmicas (calefacción, aire acondicionado, ventilación y agua caliente sanitaria), instalaciones de iluminación integradas, los sistemas de automatización y control y las instalaciones de generación eléctrica in situ. Estas instalaciones suponen más del 80% del consumo energético de un edificio.

Las disposiciones relativas a la eficiencia energética de las instalaciones de edificios existentes son de obligado cumplimiento cuando se renueva o amplía una parte de la instalación, en tanto que se adecuará la parte de la instalación renovada o ampliada para que se cumplan los valores de eficiencia energética correspondientes. Asimismo, desde mayo de 2020 se establece la obligación de incluir sistemas de control y regulación en todas las instalaciones nuevas de iluminación que se ejecuten.

El 12 de agosto de 2012 el Departamento de Asesoramiento Técnico de la Dirección Técnica de Infraestructuras de la Secretaría General del Senado elaboró un informe sobre el ahorro energético en los edificios del Senado, centrado en los sistemas de climatización y de iluminación. Dicho informe proponía tanto medidas destinadas a reducir el consumo de energía de las instalaciones del Senado y la contención de la emisión de gases de efecto invernadero, como una propuesta de normas de uso eficiente de las instalaciones.

En el marco de la planificación establecida en dicho informe se realizó la sustitución de la totalidad de las plantas enfriadoras por unidades de alta eficiencia, la instalación de electrobombas de caudal de agua variable, la sustitución de los gases refrigerantes de los equipos autónomos de aire acondicionado por refrigerantes ecológicos de bajo potencial de calentamiento global de conformidad con el Reglamento (UE) nº 517/2014 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 16 de abril, sobre los gases fluorados de efecto invernadero, la renovación parcial de la producción de calor mediante la sustitución de calderas de gosóleo por calderas de gas natural de alta eficiencia energética sin emisiones de carbono (que se completará en 2021), la mejora de la instalación eléctrica en baja tensión, la instalación de control del sistema centralizado de climatización y de sistemas de control y regulación de la iluminación en determinadas zonas.

Con respecto a los equipos terminales de las instalaciones térmicas (ventiloconvectores, radiadores, climatizadores, equipos autónomos) se sigue el criterio de sustitución al final de su vida útil por unidades de mejores prestaciones medioambientales.

En relación con la instalación de iluminación, se han instalado lámparas de bajo consumo, principalmente del tipo led, en todas las luminarias en las que ha sido viable técnicamente. En determinados ocasiones la instalación de lámparas led implica la reforma integral de los techos o la instalación eléctrica cuando se precisa la instalación de un sistema de regulación y control. Este es el caso de la iluminación del Hemiciclo, en donde la renovación completa no se podrá acometer hasta que finalice la fase III de la reforma eléctrica en baja tensión, cuya ejecución está prevista en el año 2022.

Finalmente, como generación de energía eléctrica in situ, el Senado cuenta con cuatro grupos electrógenos, que tienen por objeto el suministro eléctrico de los servicios esenciales del edificio (iluminación, seguridad, ascensores e informática, principalmente) cuando se produce un corte de corriente eléctrica. Los cuatro grupos funcionan con gosóleo, si bien su impacto medioambiental no es elevado dado su uso exclusivo en situaciones de emergencia o por razón de mantenimiento.

3. Energía renovable

El Senado no cuenta con fuentes de energía renovable in situ, si bien contractualmente el suministro de energía eléctrica se realiza con un 100% de energía renovable. El Código Técnico dispone una contribución mínima de energía renovable para cubrir la demanda de agua caliente sanitaria (ACS), si bien solo resulta de obligatoria aplicación cuando se realice una reforma integral de la instalación térmica de ACS.

El ACS en el Senado se realiza mayoritariamente mediante termos eléctricos localizados en cada punto de suministro, generalmente aseos. Solo en el caso de la cocina y algunas dependencias del sótano 2 el suministro de ACS se realiza mediante una caldera centralizada.

4. Sistemas de comunicación mecánicos

Los sistemas de comunicación mecánicos existentes en el Senado comprenden ascensores, montacargas, plataformas elevadoras e instalaciones salvaescaleras.

La norma técnica UNE-25745, de carácter voluntario, versa sobre la eficiencia energética de ascensores y escaleras mecánicas. Por el momento se ha desarrollado la primera parte de esta norma técnica relativa a la medición y la verificación de la energía consumida. La parte dos está aún sin desarrollar y en ella se especificará la clasificación asociada al gasto energético. La norma VDI4707 es una medición estándar sobre consumo energético en ascensores establecida por la Asociación de Ingenieros Alemanes. A falta de desarrollar la parte dos de la UNE-25745, este estándar es el más utilizado en Europa por las empresas de ascensores.

Los elementos que debe incorporar un ascensor energéticamente eficiente son los siguientes: máquina de tracción directa con motor síncrono, cintas planas de acero, cuadro de maniobra por microprocesadores, sistema regenerativo de energía y apagado automático de elementos led de la iluminación de la cabina.

Además de incorporar el apagado automático de la iluminación de la cabina a todos los ascensores, el Senado ha realizado la modernización de 7 ascensores teniendo en cuenta los criterios anteriormente descritos. Las obras más recientes (ascensores de comunicación "gemelos" de los edificios de Palacio y Ampliación y ascensor accesible junto al Hemiciclo) tienen la máxima eficiencia energética al incorporar todos los elementos señalados en el párrafo anterior.

5. Centro de proceso de datos

La Comisión Europea elaboró en 2008 un código denominado Best Practices for the EU Code of Conduct on Data Centers, de actualización periódica y carácter voluntario. Este código recoge un conjunto de recomendaciones de eficiencia energética de aplicación en los centros de procesos de datos (CPD).

El Plan Informático y de Comunicaciones 2020-2023 de la Cámara contempla un apartado sobre la mejora de la eficiencia energética del CPD central. Tras un estudio previo, está prevista la ejecución de una serie de medidas sobre el cerramiento y los elementos del CPD con objeto de mejorar el aislamiento entre las distintas zonas de la sala, permitiendo de esta manera reducir notablemente el consumo de energía eléctrica. En 2019 se instalaron cortinas de PVC que aíslan el espacio ocupado por las máquinas de la zona donde se han instalado unos puestos para que los técnicos accedan en remoto a los servidores y en el período 2020-23 está prevista la ejecución del resto de las medidas.

Asimismo, el sistema de alimentación ininterrumpida (SAI) que da soporte eléctrico al CPD se cambiará en 2021 por un equipo ecológico que no solo tiene una alta eficiencia en el consumo, sino además minimiza las pérdidas de calor y la refrigeración necesaria en la sala.

Criterios, objetivos y medidas

Los criterios de sostenibilidad de esta categoría son el consumo de energía primaria y las emisiones a la atmósfera derivadas de los sistemas de producción de energía que utilizan combustibles fósiles. Los impactos ambientales asociados son los siguientes: el cambio climático, las emisiones a la atmósfera, el agotamiento de energía no renovable y la salud y el confort.

Los indicadores que se usarán para medir los criterios y evaluar los progresos de la implementación de las medidas de eficiencia energética se señalan a continuación: 

  • Energía eléctrica:
    • % de reducción de consumo de energía eléctrica
  • Gas natural:
    • % de reducción de consumo de gas natural
  • Gasóleo:
    • % de reducción de consumo de gosóleo
  • Emisiones CO2:
    • % de reducción de emisiones directas de CO2
  • Energía renovable:
    • % de incremento de producción de energía renovable
    • % de incremento de consumo de energías renovables según tipología

Anualmente se fijarán objetivos concretos de reducción de consumo de energía para el año siguiente, sobre el que se realizarán los ajustes necesarios con objeto de comparar años con actividad parlamentaria y administrativa homogénea.

Para la consecución de estos objetivos se implementarán las siguientes medidas:

  1. Se integrarán todos los contadores de energía (electricidad, gas natural y gosóleo) en el sistema informático de gestión del edificio, y se instalarán nuevos contadores parciales (iluminación interior y enchufes por plantas, iluminación exterior, aparatos elevadores, ventilación, cocina, etc.), con el objeto de monitorizar todos los consumos de energía del edificio y los subconsumos más relevantes.
  2. Se migrará el sistema de gestión del edificio, que en la actualidad se utiliza exclusivamente para el control de los sistemas de climatización, a un sistema con mayores prestaciones técnicas y mejor seguridad informática en el que se integrarán las instalaciones de electricidad, iluminación y fontanería.
  3. Se caracterizará la transmitancia de la envolvente térmica del edificio mediante un modelado informático que permita la evaluación de su homogeneidad, la presencia de puentes térmicos y de puntos singulares y la permeabilidad del aire.
  4. Se registrarán anualmente indicadores de las mejoras implementadas en calefacción, distribución de calor, refrigeración, distribución de frío y ventilación mediante la medición de su eficiencia energética y su potencia instalada.
  5. Se estudiará la reducción de la demanda energética a través de los ajustes de las temperaturas de consigna y horarios y días de funcionamiento de los sistemas de climatización.
  6. Se registrarán anualmente indicadores de las mejoras implementadas en la iluminación integrada mediante la tipología de lámpara y su potencia.
  7. Se estudiará la viabilidad de instalación de placas solares en las cubiertas de los edificios del Senado.
  8. Se estudiará la viabilidad de la sustitución de los termos eléctricos por calderas de ACS alimentadas parcialmente por fuentes de energía renovable.
  9. Se revisará el estudio realizado sobre la eficiencia energética del CPD de conformidad con la actualización de 2020 del Best Practices for the EU Code of Conduct on Data Centers.
  10. Se establecerá un plan plurianual para la modernización energéticamente eficiente de los aparatos elevadores que aún no han sido reformados desde su instalación, en el que se tendrá en cuenta su conversión en ascensores accesibles en los casos en que sea viable técnica y económicamente.
  11. Se reducirá el consumo de combustible de los grupos electrógenos acortando, en la medida de lo posible, los tiempos de funcionamiento planificados por razón de mantenimiento de las instalaciones eléctricas.
  12. Se registrará la reducción anual de los gases refrigerantes con potencial de calentamiento global superior a 10 hasta su completa eliminación.
  13. Se impartirá formación periódica en eficiencia energética dirigida al personal de la Unidad de Electricidad, la Unidad de Mantenimiento y al resto de personal del Senado cuyo trabajo guarde relación con la gestión energética del edificio.
  14. Se asignarán nuevas funciones en eficiencia energética al personal cuyo cometido sea la operación, encendido o apagado de las instalaciones técnicas, pudiendo establecerse para ellos la responsabilidad del cumplimiento de objetivos parciales alineados con las medidas del presente plan.
  15. El plan de obras de la Cámara recogerá en un apartado específico de eficiencia energética las obras que tengan por objeto principal la mejora de la envolvente térmica o de las instalaciones técnicas, cuya propuesta tendrá como base el análisis de la monitorización de consumos y estudios recogidos en las medidas del presente plan.
  16. Se establecerán instrucciones y recomendaciones para fomentar el ahorro energético de los usuarios del edificio que recogerán, como mínimo, los siguientes aspectos: apagado de luces y equipos en despachos no ocupados; limitación de equipos suplementarios de aire acondicionado, calefacción o ventilación; regulación de la temperatura; uso de ascensores; horario y calendario de encendido de las calderas y de las plantas enfriadoras.

CATEGORÍA 2: AGUA

Diagnóstico

El agua es uno de los recursos naturales indispensable para el desarrollo de la vida además de un patrimonio tanto medioambiental, como cultural y social, que hay que mantener y proteger. La Directiva de la Unión Europea 2000/60/CE de 23 de octubre de 2000, por la que se establece un marco comunitario de actuación en el ámbito de la política de aguas tiene como objeto velar por la protección de los ecosistemas acuáticos y promover el uso sostenible del agua a largo plazo.

El agua tiene un valor a la vez económico, ecológico y social y todas las actuaciones deben de tener en cuenta esa triple dimensión. La innovación tecnológica permite un mayor ahorro y eficiencia en el uso del agua, así como una mejor garantía en la calidad y suministro de la misma. El Código Técnico de la Edificación, en su documento básico HS 4 Suministro de agua, dispone que todos los edificios en cuyo uso se prevea la concurrencia pública deben contar con dispositivos de ahorro de agua en los grifos. Los dispositivos que pueden instalarse con este fin son: grifos con aireadores, grifería termostática, grifos con sensores infrarrojos, grifos con pulsador temporizador, fluxores y llaves de regulación antes de los puntos de consumo. Para edificios existentes, esta disposición solo resulta de aplicación obligatoria cuando se amplía el número o la capacidad de los aparatos existentes en la instalación.

La salubridad del agua es otro aspecto fundamental, motivo por el cual la normativa vigente establece una serie de criterios sanitarios, tanto para la calidad del agua de consumo humano, como para la de determinadas instalaciones de agua cuyo rango de funcionamiento se encuentra en el intervalo de 20ºC a 45ºC y que son susceptibles de ser contaminadas por la bacteria Legionella, la cual puede provocar una infección pulmonar denominada legionelosis.

Las principales normas jurídicas que resultan de aplicación son la Directiva 98/83/CE del Consejo de 3 de noviembre de 1998 relativa a la calidad de las aguas destinadas al consumo humano, traspuesta al derecho interno español en el Real Decreto 140/2003, de 7 de febrero, por el que se establecen los criterios sanitarios de la calidad del agua de consumo humano (la Directiva será sustituida por la Directiva 2020/2184, de 16 de diciembre, con efectos de 13 de enero de 2023); y el Real Decreto 865/2003, de 4 de julio, por el que se establecen los criterios higiénico-sanitarios para la prevención y control de la legionelosis. En el ámbito del Senado, el alcance de esta norma comprende el agua caliente sanitaria y las dos torres de refrigeración ubicadas en el edificio Ampliación.

Atendiendo al tipo de instalación de agua, en el Senado pueden distinguirse cinco consumos de agua: agua sanitaria para aparatos sanitarios y fuentes de consumo humano, agua sanitaria para cocina, agua para las instalaciones de protección contra incendios, agua de refrigeración y agua de riego:

  • Agua sanitaria para aparatos sanitarios y fuentes para consumo humano. Se dispone de grifería, inodoros, urinarios y fuentes de agua en número suficiente para garantizar las necesidades de los usuarios de la Cámara. Asimismo, se aplican los protocolos recogidos en la normativa para el control y prevención de la legionelosis.
  • Agua sanitaria para cocina. El consumo de agua de la cocina es muy elevado y por ese motivo resulta conveniente separar su gestión del resto de agua sanitaria. Se dispone de grifería y de electrodomésticos. Asimismo se cuenta con lavadora para el uso del personal de limpieza. El agua procedente de la cocina se conduce a un separador de grasas para reducir al mínimo la contaminación de los cursos de agua.
  • Agua para la instalación de protección contra incendios. Existe una red de distribución de agua contra incendios, cuyos elementos finales son tanto los rociadores, como las bocas de incendio equipadas. El origen de la red es un aljibe. Con motivo de las obras de reforma de los distintos espacios del Senado o por mantenimiento puede ser necesario el vaciado de diversos tramos de la red durante la ejecución de los trabajos. En tales ocasiones se han instalado válvulas de corte con objeto de disminuir las necesidades de vaciado de agua en las actuaciones futuras, de mantenimiento o nuevas obras, en la misma dependencia.
  • Agua de refrigeración. La refrigeración principal del edificio Ampliación del Senado se realiza mediante una planta enfriadora refrigerada por dos torres de refrigeración. El agua se recircula, pero tiene pérdidas importantes por evaporación. Para garantizar las condiciones higiénico-sanitarias de esta agua se dispone de un sistema de dosificación continua de biocidas y se aplican todas las medidas recogidas en la normativa. Este uso cuenta con un contador de agua inteligente conectado al sistema informático de gestión del edificio.
  • Agua de riego. Para el riego del jardín de la Plaza de la Marina Española el Senado dispone de un sistema de riego por aspersión y goteo con control horario y contador independiente.

Criterios, objetivos y medidas

Los criterios de sostenibilidad de esta categoría son el consumo de agua y el uso de agua no potable. Los impactos ambientales asociados son el agotamiento de agua potable, las emisiones al agua y la salud.

Los indicadores que se usarán para medir los criterios y evaluar los progresos de la implementación de las medidas relativas al uso del agua son los siguientes: 

  • Agua:
    • % de reducción de consumo de agua
  • Uso de agua no potable:
    • % de incremento de uso de agua no potable
  • Uso de agua de escorrentía de la lluvia:
    • % de incremento de uso de agua de escorrentía de lluvia

Anualmente se fijará un objetivo concreto de reducción de consumo de agua para el año siguiente, sobre el que se realizarán los ajustes necesarios con objeto de comparar años con actividad parlamentaria y administrativa homogénea.

Para la consecución de estos objetivos se implementarán las siguientes medidas:

  1. Se instalarán contadores de agua inteligentes en los distintos subconsumos, incluyendo la diferenciación entre agua fría y caliente, que serán integrados en el sistema informático de gestión del edificio con el objetivo de que se pueda monitorizar y gestionar el consumo de agua para, de esta forma, fomentar su reducción.
  2. Se definirá una política de reemplazo de los aparatos sanitarios existentes por otros equivalentes de bajo consumo (inodoros, urinarios, grifos, duchas, lavavajillas y lavadoras), de conformidad con los criterios recogidos en el Manual de Contratación Pública Ecológica del Senado.
  3. Se instalarán sistemas de detección de fugas de agua con objeto de reducir el impacto de las que, de otro modo, no podrían detectarse, y se integrarán en el sistema informático de gestión del edificio.
  4. Se estudiará la mejora de la eficiencia del consumo de agua no sanitaria: incendios (minimizando las pérdidas por vaciado de circuitos por razón de obras), riego (mediante la instalación de sensores de humedad y zonificado del control del riego) y refrigeración (se estudiará el reemplazo de las torres de refrigeración existentes por otras de mayor eficiencia).
  5. Se estudiará la viabilidad de instalación de sistemas de reutilización de aguas grises y pluviales para usos no sanitarios como la descarga de inodoros o el riego.
  6. Se estudiarán mejoras en las instalaciones de fontanería con el objeto de minimizar las pérdidas de agua y de mantener los niveles óptimos de salubridad: mejoras en aislamiento y reemplazo de tuberías, revisión del mantenimiento preventivo, minimización de los recorridos de las tuberías.
  7. Se estudiará la mejora de la canalización de las aguas superficiales de escorrentía con objeto de evitar, reducir o retrasar el desagüe de las precipitaciones para minimizar el riesgo de que se produzcan inundaciones.
  8. Se impartirá formación de gestión del uso eficiente del agua para el personal de mantenimiento, el de cocina y el de limpieza y se designará a una persona de cada tipo de personal como supervisora del ahorro de agua.
  9. Se estudiarán medidas para minimizar la demanda de agua del jardín, tales como el uso de mantillo o la inclusión de especies autóctonas, con menores necesidades de riego.
  10. Se establecerán instrucciones y recomendaciones para fomentar el ahorro de agua de los usuarios del edificio que recogerán, como mínimo, los siguientes aspectos: instrucciones para el personal de cocina y cafetería y señalética.

CATEGORÍA 3: MATERIALES Y RESIDUOS

Diagnóstico

La OCDE calcula que el consumo mundial de materiales se duplicará en los próximos cuarenta años y que la generación anual de residuos se incrementará en un 70 % de aquí a 2050, habida cuenta de que la mitad de las emisiones totales de gases de efecto invernadero y más del 90 % de la pérdida de biodiversidad y del estrés hídrico se deben a la extracción y la transformación de los recursos.

El Pacto Verde Europeo, presentado por la Comisión Europea el 11 de diciembre de 2019, inició una estrategia concertada para la transición a una economía más circular, en la cual el valor de los productos, los materiales y los recursos se mantenga en la economía durante el mayor tiempo posible, y en la que se reduzca al mínimo la generación de residuos. Este Pacto constituye una contribución esencial a los esfuerzos de la Unión Europea encaminados a lograr una economía sostenible, hipocarbónica, eficiente en el uso de los recursos y competitiva.

El 11 de marzo de 2020 la Comisión Europea aprobó un Plan de acción para una economía circular con el objeto de acelerar el cambio transformador que requiere el Pacto Verde Europeo, prevaliéndose al mismo tiempo de las medidas en favor de la economía circular aplicadas desde 2015. Dicho plan recoge, entre otros, los siguientes principios de sostenibilidad de materiales: mejorar la durabilidad y la capacidad de reutilización, actualización y reparación de los productos; aumentar el contenido reciclado; reducir la generación de residuos; mejorar la recuperación de materiales; limitar el uso de productos de un solo uso (especialmente los plásticos) e incentivar los "productos como servicios" (modelos en los que los proveedores conservan la propiedad del producto o la responsabilidad por su rendimiento a lo largo de su ciclo de vida).

Asimismo, se promueven los principios de circularidad en todo el ciclo de vida de los edificios y se señala que la Comisión adoptará una nueva estrategia para un entorno construido sostenible de carácter integral. Entre otras medidas, se propondrá la utilización de una herramienta desarrollada por la Comisión, en fase de pruebas y denominada Level(s), para integrar la evaluación del ciclo de vida en la contratación pública.

En el ámbito estatal la Estrategia Española de Economía Circular, España Circular 2030 se alinea con estos objetivos y sienta las bases para impulsar un nuevo modelo de producción y consumo en el que el valor de los productos, materiales y recursos se mantenga en la economía durante el mayor tiempo posible, en el que se reduzcan al mínimo la generación de residuos y se aprovechen al máximo los que se pueden evitar.

Atendiendo a la eficiencia de los materiales y su utilidad circular se pueden identificar tres áreas en el Senado: el ciclo de vida de las infraestructuras (acciones de todo el ciclo de vida relacionadas con los productos de construcción: el diseño e ingeniería de edificios, la gestión sostenible de la construcción, el mantenimiento y la conservación del edificio), la gestión de los residuos (tanto urbanos, como los de construcción) y el suministro sostenible de productos.

1. Ciclo de vida de las infraestructuras

La gestión eficiente de materiales de los edificios del Senado y sus infraestructuras técnicas debe perseguir un comportamiento optimizado a lo largo del ciclo de vida y una mayor duración de los activos construidos. Este objetivo se realiza fundamentalmente a través del mantenimiento y conservación de los edificios e instalaciones.

La Dirección Técnica de Infraestructuras es la responsable de realizar la conservación y mantenimiento del edificio, tanto a través de personal propio (Unidad de Mantenimiento y Unidad de Electricidad), como de empresas externas especializadas: asistencia técnico-arquitectónica para la conservación y mejora de los edificios y empresas de mantenimiento (instalaciones térmicas, eléctricas, sistemas de comunicación mecánicos y sistemas de seguridad). Los sistemas de seguridad, que incluyen tanto la protección contra incendios como la videovigilancia y los sistemas de alarma de intrusión, tienen además un papel esencial en la prevención y minimización de daños sobre los activos del edificio.

Asimismo, en el Senado se acometen obras de reforma vinculadas directamente a la conservación del edificio, pero además se realizan obras de mejora que persiguen la modernización, adaptación o ampliación de determinados espacios del edificio o sus instalaciones. Las obras son responsables de los impactos ambientales más importantes después de los relacionados con el consumo de energía. Estos guardan relación con los recursos utilizados y con las emisiones y los efectos sobre el ecosistema asociados a la extracción, la transformación, el transporte de materias primas y los residuos de construcción y demolición.

Aunque el Senado viene teniendo en cuenta los principios de circularidad y utilización eficientes de los recursos en la gestión de sus infraestructuras, no se aplican de forma sistemática métodos de evaluación de su comportamiento ambiental, lo que se denomina análisis del ciclo de vida.

El análisis del ciclo de vida, que está adquiriendo cada vez mayor importancia en la evaluación del impacto ambiental de los edificios, cobra especial relevancia en la fase de diseño, ya que permite realizar cambios que conlleven a un menor impacto ambiental con el mínimo coste. Esto solo puede realizarse generando y comparando distintas versiones de diseño. Sin embargo, realizar un análisis de ciclo de vida requiere una gran recopilación de datos para cada una de las variantes del proyecto. Por este motivo, las herramientas de análisis de ciclo de vida deben estar integradas con un entorno de diseño que facilite el acceso a toda la información necesaria para valorar las diferentes opciones y su impacto medioambiental. Los Building Information Model (BIM) son procedimientos de trabajo donde se procesan y gestionan las representaciones digitales de las características físicas y funcionales de un edificio y sus instalaciones. Estos modelos reúnen toda la información necesaria para el análisis y la toma de decisiones respecto a un edificio.

Asimismo, con el propósito de normalizar matemáticamente todos los datos de entrada (los relativos al edificio u obra) y los de salida (los impactos ambientales), la norma UNE 15978, relativa a la sostenibilidad en la construcción, recoge métodos de cálculo para la evaluación del comportamiento ambiental del ciclo de vida de un edificio, diferenciándose cuatro etapas: producto (suministro de materias primas, transporte y transformación), construcción (transporte, ejecución y proceso de instalación), uso (mantenimiento, reparación, sustitución y rehabilitación) y fin de vida (deconstrucción, transporte, tratamiento de residuos y eliminación).

La ya mencionada herramienta Level(s) de la Comisión Europea proporciona, por otro lado, un marco de indicadores comunes europeos, que serán de aplicación en los edificios de nueva construcción y en los que se realicen reformas importantes (las que afectan a más del 25% del edificio). Level(s) señala una serie de herramientas aplicables a los ciclos de vida de materiales eficientes en recursos y circulares que, si bien no serían de aplicación en los edificios actuales del Senado, habida cuenta de que en el Senado no se realizan obras de reformas que afectan a más del 25% del edificio, se considera conveniente estudiar su implementación en las obras con mayor impacto potencial en el medio ambiente, así como en las obras de ampliación del Senado.

Asimismo, es preciso tener en cuenta que el análisis del ciclo de vida es una tarea muy intensiva en tiempo y recursos, que requiere un esfuerzo significativo en la recopilación de datos, la creación de modelos utilizando paquetes informáticos específicos, la correcta interpretación de los resultados y la presentación de informes en un formato sencillo de comprender. Por una parte, esto afecta directamente al Senado respecto a los procedimientos de recopilación de datos del estado actual del edificio, toda vez que no se dispone de un modelo informático que integre la totalidad de la información, a lo que hay que añadir la necesidad de trabajo de campo en las partes del edificio sobre las que no se dispone de la documentación técnica necesaria. Por otra parte, como se abordará en el apartado del presente informe relativo a la contratación pública, los costes en tiempo y recursos mencionados podrán suponer una barrera de entrada a las pequeñas y medianas empresas, que intervienen tanto en la fase de diseño, como de ejecución.

2. Residuos

En la Unión Europea se desechan 2.700 millones de toneladas de residuos cada año, de las cuales 90 millones de toneladas son residuos peligrosos. Como promedio, en torno al 40% de los residuos municipales se recicla o se reutiliza y el resto se deposita en vertederos o se incinera.

La Directiva 2008/98/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 19 de noviembre de 2008, sobre los residuos (Directiva Marco de residuos) constituye el principal instrumento normativo de la gestión de los residuos en Europa. Su transposición al ordenamiento nacional se ha realizado mediante la Ley 22/2011, de 28 de julio, de residuos y suelos contaminados. El objetivo de esta normativa está centrado en la prevención, la reutilización y el reciclado, de forma que se minimice la extracción de recursos naturales adicionales y se avance así hacia la "sociedad del reciclado", que menciona la Directiva.

Los residuos de envases y su reciclado cuentan con una normativa específica: la Directiva 94/62/CE relativa a los envases y residuos de envases, modificada por la Directiva (UE) 2018/852 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 30 de mayo de 2018, que ha sido transpuesta al ordenamiento jurídico nacional mediante la Ley 11/1997, de 24 de abril, de envases y residuos de envases. Está en tramitación la elaboración de una nueva Ley de residuos, que incorporará tanto las disposiciones de la Directiva (UE) 2018/852 mencionada, como distintos preceptos contenidos en la Directiva (UE) 2019/904, referidos a los envases de plástico de un solo uso.

La actividad propia del Senado, así como de las empresas y servicios que prestan su actividad en las instalaciones de la Cámara, implican la generación de un volumen significativo de residuos urbanos de diferente naturaleza. Asimismo, las obras de reforma que se realizan en los edificios de la Cámara y las actividades de mantenimiento generan residuos de construcción y demolición (RCD). Tanto los residuos urbanos como los RCD pueden clasificarse en no peligrosos y peligrosos.

En relación con los residuos urbanos no peligrosos, la empresa adjudicataria del servicio de limpieza del Senado realiza la clasificación y recogida de los residuos depositados en las papeleras y contenedores de envases y de papel y cartón ubicados en los despachos y zonas comunes de la Cámara. Los residuos se depositan posteriormente en los contenedores correspondientes a cada tipo de residuo (envases, papel y cartón, restos no reciclables) del Ayuntamiento de Madrid, quien realiza su retirada. Este sistema impide realizar el registro de la masa de residuos generado por cada tipo, necesario para la obtención de los indicadores de impacto ambiental que permitan valorar la efectividad de las medidas que se propondrán para la reducción, reutilización y reciclado de residuos. Podrán estudiarse sistemas alternativos que permitan conocer la masa de residuos generados.

Además de los residuos gestionados por la contrata de limpieza, el Senado genera los siguientes residuos urbanos no peligrosos: restos orgánicos e inorgánicos, envases, vidrio y cartón procedentes de las actividades de restauración, cuya clasificación y recogida es responsabilidad de la empresa contratista del servicio de restaurante y cafetería y cuyo destino final son los contenedores del Ayuntamiento de Madrid; residuos clínicos e higiénicos y aceites domésticos e industriales, de los que se encargan gestores de residuos autorizados. Respecto a los residuos generados en la cocina y cafetería, se ha detectado un margen de mejora en el procedimiento de clasificación y recogida para su posterior reciclado.

El Senado también genera residuos peligrosos, entre los que destacan los siguientes: tóner de impresoras, pilas y baterías, lámparas, material eléctrico y electrónico. Para estos residuos se han suscrito convenios con entidades sin ánimo de lucro gestoras de los Sistemas Integrados de Residuos que contempla la Ley de residuos y suelos contaminados. Los envases de sustancias tóxicas se gestionan por un gestor autorizado.

Finalmente, la gestión de los residuos de materiales de construcción y de demolición se realiza en el Senado mediante la gestión de residuos de obra exigida a las empresas constructoras. En el caso de residuos de construcción generados por el personal de mantenimiento, se recurre a empresas externas de gestión de residuos o se trasladan a un punto limpio.

3. Suministro sostenible de productos

Una política de suministros sostenible debe tener en cuenta tanto los impactos ambientales derivados de su transporte, como los incorporados en el propio producto. Mientras que los primeros pueden minimizarse mediante la prevalencia de proveedores locales, para los segundos hay que tener en cuenta aspectos como el etiquetado ecológico, su capacidad de ser reciclado y reutilizado, así como la reducción, en la medida de lo posible, de los productos de un solo uso.

Respecto a la reducción de los productos de un solo uso, el plástico tiene una especial relevancia, toda vez que su lenta degradación hace que sea uno de los elementos de mayor impacto en la contaminación de los mares y supone entre el 80% y el 85% de la basura marina en el ámbito de la Unión Europea. La Unión Europa ha establecido un marco jurídico común a través de la Directiva (UE) 2019/904 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 5 de junio de 2019, relativa a la reducción de determinados productos de plástico en el medio ambiente, que presta particular atención a la reducción de los productos fabricados con plástico oxodegradable, así como de los productos de plástico de un solo uso. A este respecto, la Dirección de Presupuestos y Contratación elaboró un informe sobre la eliminación de los plásticos de un solo uso en el Senado, cuyas medidas se han recogido en el presente plan, de conformidad con lo acordado por la Mesa del Senado en su reunión del día 4 de febrero de 2020.

Aunque en el Senado no existe una política formal de suministros sostenibles, durante los últimos años se han incorporado paulatinamente criterios ecológicos en los procedimientos de contratación, como se recoge en el apartado de Contratación Pública Ecológica, a la par que se han sustituido determinados productos de plástico por su equivalente ecológico, tales como las bolsas proporcionadas por la Tienda del Senado y el restaurante, que han sido reemplazadas por bolsas de papel y de material biodegradable respectivamente, o las bandejas y cubiertos de plásticos, sustituidas por resina y madera. Asimismo, las fuentes de agua ubicadas en el edificio se hallan directamente conectadas a la red, evitándose así la utilización de bidones de plástico. Respecto de los vasos, la Mesa del Senado, en su reunión del día 10 de noviembre de 2020, acordó modificar el contrato de suministros de productos higiénicos y recambios para aparatos sanitarios en el sentido de sustituir los vasos de plástico contemplados en el mismo por vasos de cartón desechables.

Criterios, objetivos y medidas

Los criterios de sostenibilidad de esta categoría que se valorarán son el impacto de los materiales de construcción, la clasificación de residuos y el uso de productos sostenibles. Los impactos ambientales asociados son las emisiones a la atmósfera, tierra y agua; el agotamiento de energía no renovable; el agotamiento de recursos materiales; y la generación de residuos.
Los indicadores que se usarán para medir los criterios y evaluar los progresos de la implementación de las medidas de reducción del impacto de los materiales y de la mejora de su utilidad circular son los siguientes:
El objetivo de esta categoría es reducir el impacto de los materiales en el medio ambiente y mejorar su utilidad circular.   

  • Ciclo de vida:
    • % de mejora de los impactos derivados de las grandes obras (se utilizará un índice de mejora sobre los indicadores que los usuarios del marco comunitario Level(s) tienen obligación de caracterizar y notificar. Son los siguientes: el potencial de calentamiento global (PCG), el potencial del agotamiento de la capa de ozono estratosférico (PACO), el potencial de acidificación de la tierra y el agua (PA), el potencial de eutrofización (EP), el potencial de formación de oxidantes fotoquímicos del ozono troposférico (PCOF), y el potencial de agotamiento de los recursos abióticos de los elementos (PARA de los elementos-últimas reservas) y de los combustibles fósiles PARA de los combustibles fósiles)
  • Residuos:
    • % de reducción de generación de residuos urbanos residuales (no reciclables)
  • Reciclaje:
    • % de incremento de peso específico de residuos urbanos reciclables
  • Productos sostenibles:
    • % de suministros sostenibles    

Se fijarán objetivos concretos de mejora sobre cada uno de los indicadores, una vez que se hayan implementado los procedimientos y sistemas necesarios para su monitorización.
Para la consecución de estos objetivos se implementarán las siguientes medidas:

  1. Se estudiará el uso de las herramientas adecuadas para el análisis del ciclo de vida en la obras que se realicen en la Cámara y, por consiguiente, la especificación de materiales de construcción con un bajo impacto ambiental.
  2. Se incluirá un documento de análisis de ciclo de vida como parte de la documentación integrante de un proyecto de obras que incluya la energía incorporada y los indicadores de impacto ambiental que implica su puesta en obra desde las etapas de fabricación y construcción, desglosada por materiales, envases, maquinaria, medios auxiliares y residuos.
  3. Se estudiará la implantación de un modelo de gestión basado en la herramienta Building Information Model (BIM), con objeto de integrar en una plataforma única los planos y la documentación técnica de las obras, así como la creación de una "Oficina técnica" encargada de recopilar, procesar y comprobar la veracidad de la documentación técnica en todas las fases de un proyecto de obras.
  4. Se definirá un protocolo de diseño integrado aplicable a las obras y a los suministros con el objeto de mejorar la identificación y definición de las funciones, responsabilidades y contribuciones de cada interesado para garantizar la entrega de una obra o suministro funcional y sostenible que se haya diseñado, construido o instalado de acuerdo con el modo de funcionamiento previsto.
  5. Se registrará la valorización de los residuos de obra en relación con la masa total de residuos generados mediante el procesado de los correspondientes certificados emitidos por las entidades de gestión de residuos.
  6. Se definirá una política de suministros sostenible que, en todo caso, estudiará alternativas más sostenibles e incentivará el uso de etiquetas ecológicas, autodeclaraciones ambientales o declaraciones ambientales de productos, la durabilidad, la capacidad de reciclaje y reutilización y el uso del "producto como servicio".
  7. Se realizará un inventario de los productos químicos tóxicos utilizados en trabajos de limpieza y de mantenimiento y se estudiarán alternativas más sostenibles.
  8. Se implantará un sistema de gestión integral de los residuos sólidos urbanos, que tendrá por objetivo mejorar la separación, clasificación y almacenaje de los mismos para facilitar su reciclado y revalorización, y que permita su trazabilidad y control. Este sistema incluirá, en todo caso, aspectos que faciliten la implicación de los usuarios, tales como el incremento del número de cubos para cada tipo de residuo, la uniformidad de los mismos y de los símbolos de los principales tipos de residuos para facilitar su identificación y las campañas de información a las personas que desempeñan su cometido profesional en el Senado.
  9. Se establecerá un protocolo para mejorar la gestión de los residuos generados por las actividades de restauración y se habilitarán los espacios necesarios para realizar una correcta clasificación de los residuos.
  10. Se monitorizarán los residuos sólidos urbanos desglosados por tipología (papel, envases, vidrios, orgánica, resto) y por uso (actividades de restauración; actividad administrativa y parlamentaria).
  11. Se impartirá formación al personal técnico de mantenimiento y de supervisión de obras en gestión de residuos de construcción.
  12. Se impartirá formación en materia de suministros sostenibles a las unidades responsables de la adquisición de productos.
  13. Se exigirá, en aquellas ocasiones en que la Cámara autorice la utilización de dependencias del Senado para la celebración de actos o eventos no parlamentarios, que los organizadores no utilicen productos incluidos en la Directiva 2019/904.
  14. Se establecerán instrucciones y recomendaciones para fomentar la reducción, reciclaje y reutilización de residuos que, como mínimo, abarcarán los siguientes aspectos: esquemas de reciclaje de productos de oficina, latas y botellas, plásticos y restos de comida; políticas de uso de papel (impresión a doble cara, uso de papel reciclado o de bajo gramaje, calendarios y agendas digitales, archivo electrónico, prensa electrónica); desarrollo y avance de la transformación digital para una administración sin papeles; políticas de reutilización de mobiliario y equipos informáticos mediante donaciones a colegios u ONGs; limitaciones de productos de un solo uso (fomento de envases y cubiertos reutilizables en las actividades de restauración y catering; eliminación de plásticos de un solo uso).

CATEGORÍA 4: CALIDAD DEL AMBIENTE INTERIOR

Diagnóstico

La calidad del ambiente interior está relacionada con la presencia de diferentes contaminantes químicos, biológicos y físicos que pueden afectar al bienestar y a la salud de los ocupantes de un edificio.
Los contaminantes químicos y biológicos más habituales presentes en el ambiente de un edificio son los productos originados en combustión (por ejemplo, monóxido de carbono y óxido de nitrógeno producidos por los vehículos del garaje), compuestos orgánicos volátiles (emitidos principalmente por los materiales de construcción y acabados, mobiliario, decoraciones y los productos químicos de limpieza), los plaguicidas, el radón, los hongos, los virus y las bacterias. La disminución de estos contaminantes se hace con una buena ventilación y, en la medida de lo posible, actuando sobre la fuente de emisión (empleando materiales con bajas emisiones, mejorando la limpieza o limitando los procesos de combustión).
Los contaminantes físicos incluyen tanto las condiciones termohigrométricas del edificio (temperatura y humedad), como la iluminación (confort visual) y los ruidos y vibraciones. Una buena zonificación térmica del edificio, de forma que se puedan contemplar los efectos del soleamiento y cargas internas, y el control de la temperatura en las distintas áreas para ajustarse a las demandas de los usuarios afectados, permite aumentar la calidad ambiental de los espacios de trabajo. De igual forma, la existencia de zonas de control de iluminación permite disponer de niveles de iluminación diferentes en las distintas áreas del edificio tanto para ajustarse al aprovechamiento de la luz natural como para discriminar diferentes necesidades lumínicas de los usuarios.
El Reglamento de Instalaciones Térmicas de Edificios determina el nivel de calidad de aire exigible y se remite a la norma UNE 13779, donde se recogen los procedimientos aplicables para su cumplimiento. Adicionalmente, cabe destacar la Directiva Europea 2004/42/CE sobre emisiones de los compuestos orgánicos volátiles de pinturas y barnices y la norma ISO 16000 que contiene los criterios para las mediciones de estos compuestos en el aire interior. Otras normas de calidad de ambiente interior son la UNE 12464, que permite diseñar espacios con alto confort visual y el documento básico HR del Código Técnico de la Edificación que define los elementos constructivos que conforman un recinto y que influyen en la transmisión de ruido y vibraciones.
La medición de la conformidad de los estándares de calidad del aire recogida en la norma UNE 13779 se realiza en el Senado con carácter semestral por una empresa externa especializada. Entre los diferentes parámetros que se analizan, la concentración de CO2 se considera valor de referencia para la calidad del aire en aquellos lugares donde no se emiten gases tóxicos, toda vez que el CO2 es un buen detector de bioefluentes humanos.
Asimismo, el Senado es la primera institución española que lleva a cabo un estudio de niveles de gas radón en sus dependencias, que fue realizado en el año 2019 por la Universidad de Cantabria. En general, los valores de la concentración son bajos y similares al de la media en las viviendas españolas.
El método principal para la disminución de carga de contaminantes químicos y biológicos en locales interiores es la ventilación. Sin embargo, el aumento del caudal de ventilación pude suponer un consumo energético excesivo, causado por el aumento de la cantidad de aire exterior que se debe acondicionar antes de introducirlo en ambientes interiores. Por este motivo, se han instalado sondas y detectores de CO2 en las unidades de tratamiento de aire del Senado y de CO en el garaje, que regulan el aire según las necesidades y permite asegurar óptimas condiciones de calidad del aire sin derroche de energía.
Otra forma de reducir los contaminantes químicos en el ambiente es limitando las emisiones producidas por los materiales de construcción, acabados, mobiliario, decoraciones y productos químicos de limpieza. A este respecto, es importante que los materiales presenten en su constitución concentraciones de compuestos orgánicos volátiles lo más bajas posibles. Asimismo, se recomienda la limpieza profunda de alfombras, moquetas y tapices, lo que ya se viene realizando en el Senado de forma periódica por una empresa especializada.
En relación con la mejora de las condiciones termohigrométricas y de iluminación, se han realizado avances en la zonificación térmica el edificio (por ejemplo, los despachos de Senadores se encuentran independizados en cuatro categorías térmicas, según su ubicación) y del control de la iluminación (cabe destacar la posibilidad de selección de ambientes lumínicos en determinadas dependencias del edificio Palacio).
En materia de ruidos y vibraciones no se realiza en el Senado un control ambiental de forma sistemática, si bien las deficiencias en esta materia son reportadas, en su caso, por el Servicio de Prevención de Riesgos Laborales. Asimismo, en todas las obras de reforman se aplican los criterios contenidos en el Código Técnico de la Edificación, tanto en los recintos habitables, como en los de instalaciones, siempre y cuando es técnica y económicamente viable. Adicionalmente, se han ejecutado actuaciones específicas de aislamiento acústico en el almacén de papelería y en los despachos del Área de Desarrollo de la Dirección de Tecnologías de la Información y de las Comunicaciones.

Criterios, objetivos y medidas

Los criterios de sostenibilidad de esta categoría que se valorarán son la eficacia de la ventilación y el confort térmico, lumínico y de ruido de los usuarios. El impacto ambiental asociado a estos criterios es la salud y el confort.
El objetivo es mejorar la calidad del ambiente interior. Se establecen dos indicadores de impacto ambiental y se valorará anualmente su mejora:

  • Ventilación:
    • % puntos con contenido de CO2 inferior a 500 ppm
  • Confort usuarios:
    • % mejora sobre evaluación de niveles de confort térmico, lumínico y de ruido

Para la consecución de dichos objetivos se llevarán a cabo las siguientes medidas:

 

  1. Se realizará un estudio lumínico para garantizar que entre un 60% y un 90% de los ocupantes tengan acceso a la iluminación natural y artificial, así como a sus dispositivos de control, para asegurar las mejores prácticas de eficiencia y confort visual, de conformidad con la Guía Técnica para el aprovechamiento de luz natural en la iluminación de edificios (IDAE) y la norma UNE 12464 relativa a la iluminación en centros de trabajo.
  2. Se redactará un plan de prevención y control de la calidad de aire ambiental, que incluirá un estudio sobre la ubicación de las tomas y salidas de aire y en el que se determinarán las zonas donde se deben instalar sensores de CO2 o de calidad del aire específicos.
  3. Se realizará una evaluación analítica de los niveles de confort térmico ("modelado térmico"), lumínico y de ruido del edificio tomando en consideración las variaciones estacionales.
  4. Se integrará la medición de monóxido de carbono del garaje en el sistema informático de gestión del edificio.
  5. Se registrarán las actuaciones de mejora de la zonificación térmica y de control de la iluminación. 

CATEGORÍA 5: TRANSPORTE

Diagnóstico

El uso extensivo de automóviles y su excesiva dependencia del petróleo contribuyen a incrementar los problemas medioambientales. La reducción del uso del automóvil supondría una disminución directa en el consumo de combustible y en la contaminación del aire y el agua. En transporte aéreo, el impacto ambiental es importante, pero los beneficios socioeconómicos también lo son. Los tipos de impacto ambiental del transporte se pueden clasificar como de efecto local (ruido, contaminación de aire local, uso de espacio), o de efecto global (consumo de materiales no renovables, aportación al cambio climático). La forma más eficaz de reducir los impactos del transporte es actuar sobre la demanda con el fin de incentivar y promover cambios de comportamiento hacia modos de transporte sostenibles.
La Ley de cambio climático y transición energética será la norma de referencia en cuestiones relativas a la movilidad y al transporte sin emisiones como parte de la respuesta al cambio climático. Una de las medidas de la citada ley es un mandato de modificación del Código Técnico de la Edificación para establecer nuevas obligaciones relativas a la instalación de puntos de recarga en edificios de nueva construcción y en edificios existentes.
A continuación se analiza la situación de los edificios del Senado en el ámbito del transporte y la movilidad, para lo que se han estudiado cuatro criterios medioambientales. Cabe destacar, en primer lugar, la proximidad del edificio al transporte público para, de esta forma, contribuir a la reducción de la contaminación derivada del uso de los medios de transporte y las congestiones de tráfico. Se analiza en segundo lugar, la proximidad a servicios (restauración, bancos, correos, sanitario) para, de esta forma, reducir la necesidad de realizar viajes largos o múltiples desplazamientos. En tercer lugar, se detallan las medidas tendentes a facilitar el uso de modos de transporte alternativos bajos en carbono. Finalmente, se considera el impacto ambiental de los viajes de larga distancia.

1. Proximidad al transporte público

La ubicación del Senado es excelente por su proximidad a la red de transporte público. En un radio inferior a 500 metros se tiene acceso a 4 líneas de metro y multitud de líneas de autobús con tiempos de espera máximos inferiores a los 15 minutos.

2. Proximidad a servicios

El Senado cuenta con diversos servicios en sus propias instalaciones, lo que permite reducir la necesidad de los desplazamientos: cafetería y restaurante, servicio de correos, servicio médico y de enfermería, agencia de viajes y servicios bancarios.

3. Modos de transporte alternativos bajos en carbono (corta distancia)

Los modos de transporte bajos en carbono utilizados en los desplazamientos de corta distancia al Senado son los vehículos eléctricos y las bicicletas.
Desde diciembre de 2018 el parque móvil del Senado está integrado por 14 vehículos con etiqueta energética cero emisiones y ECO, lo que ha conllevado la instalación de 14 puntos de carga para este tipo de vehículos. La directiva EPBD prevé que los Estados miembros deberán determinar un número mínimo de puntos de carga para los edificios no residenciales con más de veinte plazas de aparcamiento. Hasta que se transponga la directiva, la norma de aplicación en España es el Reglamento Electrotécnico de Baja Tensión, que establece que los garajes de nueva construcción deben contar con un cargador eléctrico por cada cuarenta plazas. Sin embargo, las guías técnicas de buenas prácticas recomiendan que el porcentaje de plazas con carga para vehículos eléctricos oscile entre el 20 y 40% y el porcentaje de plazas con preinstalación para vehículos eléctricos entre el 40 y el 70% de las plazas.
Asimismo, el Senado facilita el acceso en bicicleta: el garaje cuenta con espacio para el estacionamiento de bicicletas y pone vestuarios a disposición de los ciclistas, que cuentan con duchas y zonas ventiladas para la ropa húmeda.

 

4. Viajes de larga distancia

Los viajes de larga distancia incluyen tanto los desplazamientos de los senadores entre su circunscripción y la sede del Senado como los viajes necesarios que realizan los miembros y el personal de Senado por razones del servicio. Se contempla el transporte aéreo nacional e internacional, así como el transporte por ferrocarril nacional.
El impacto ambiental de estos viajes podría reducirse priorizando el transporte en tren sobre el aéreo o mediante mecanismos de compensación de la huella de carbono, cuya implantación podría corresponder a las empresas que realizan el transporte o a la propia Cámara.

Criterios, objetivos y medidas

Los criterios de sostenibilidad de esta categoría que se valorarán son los modos sostenibles de transporte y las instalaciones que les darán soporte o faciliten su uso. Los impactos ambientales asociados son el cambio climático, las emisiones a la atmósfera y la salud.
El objetivo de esta categoría es reducir las emisiones de carbono asociadas al transporte. Se establecen dos indicadores de impacto ambiental y se valorará anualmente su mejora: 

  • Transporte sostenible:
    • % uso de medios de transporte bajos en carbono en desplazamiento al Senado 

Para la consecución de dichos objetivos, se llevarán a cabo las siguientes medidas:

  1. Se registrarán las etiquetas ambientales de todos los vehículos autorizados para acceder al garaje del Senado.
  2. Se realizará un estudio sobre el modo de acceso de los trabajadores del Senado a su puesto de trabajo, en el que los datos se recabarán mediante encuesta o formulario.
  3. Se realizarán campañas de sensibilización para promover el transporte a pie, en bicicleta, en transporte público o en vehículos compartidos, con el objeto de reducir la huella de carbono en los desplazamientos de las personas que realizan sus funciones en el Senado.
  4. Se tomarán las medidas necesarias para garantizar al personal autorizado un espacio de estacionamiento de bicicletas en el aparcamiento del Senado con la capacidad adecuada y de acceso fácil y seguro.
  5. Se solicitará al Ayuntamiento de Madrid la instalación de puntos de aparcamiento de bicicletas en las proximidades de los edificios del Senado.
  6. Se estudiará la ampliación de la instalación de puntos de carga eléctricos en el garaje del Senado con la correspondiente reserva de uso del aparcamiento.
  7. Se estudiarán mecanismos de compensación de carbono tomando como referencia las prácticas compartidas en la Red de Intercambio Ambiental del Parlamento Europeo y los parlamentos nacionales y se propondrán medidas para neutralizar la huella de carbono de los viajes de larga distancia.

B. CONTRATACIÓN PÚBLICA ECOLÓGICA

Diagnóstico

La contratación pública ecológica es una importante herramienta para la utilización responsable y eficiente de los recursos y la reducción del impacto medioambiental.
Las iniciativas y la normativa de la Unión Europea ordenan aspectos relacionados con la sostenibilidad de obras, bienes y servicios en el ámbito de la contratación pública, ya sea con carácter obligatorio (directivas sobre contratación pública que deben ser transpuestas a las legislaciones nacionales) o voluntario (criterios de contratación pública ecológica).
La Directiva 2014/23/UE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 26 de febrero de 2014, sobre contratación pública contempla, entre otras cuestiones, la inclusión de cláusulas medioambientales en los procedimientos de licitación como instrumento para implementar las políticas tanto europeas como nacionales en la materia. Su transposición a nuestro país se realizó mediante la Ley 9/2017, de 8 de noviembre, de Contratos del Sector Público, que por primera vez establece la obligación de los órganos de contratación de velar por que el diseño de los criterios de adjudicación permita obtener obras, suministros y servicios de gran calidad mediante la inclusión de aspectos cualitativos, medioambientales, sociales e innovadores vinculados al objeto del contrato. Asimismo, se introduce la posibilidad de usar el cálculo del coste de ciclo de vida para la determinación de la oferta económicamente más ventajosa. El coste del ciclo de vida incluye no solo los costes relativos a la adquisición, uso (consumo de energía y otros recursos), mantenimiento y costes de fin de vida (retirada y reciclado), como también otros costes imputados a externalidades medioambientales, a condición de que su valor monetario pueda calcularse y verificarse.
En el año 2005 la Comisión Europea publicó por primera vez un manual sobre la contratación pública ecológica (CPE), revisado en 2016 con la finalidad de ayudar a las administraciones públicas a adquirir bienes y servicios con bajo impacto en el medio ambiente. El Plan de acción para una economía circular de 2020 abandona el enfoque voluntario de la CPE al señalar que la Comisión propondrá criterios y objetivos mínimos obligatorios en la legislación sectorial e introducirá gradualmente requisitos obligatorios de notificación para supervisar la incorporación de la CPE sin crear una carga administrativa injustificada para las administraciones públicas. Además, seguirá apoyando la ampliación de capacidades organizando actividades de orientación, formación y difusión de buenas prácticas y alentando a las administraciones públicas a participar en la iniciativa "Compradores públicos por el Clima y el Medio Ambiente", que facilitará los intercambios entre compradores comprometidos con la aplicación de la CPE.
Asimismo, la Ley de cambio climático y transición energética prevé la elaboración de un catálogo de prestaciones cuya contratación tendrá en cuenta la lucha contra el cambio climático y en el que se identificarán criterios de reducción de emisiones y de huella de carbono, incluidos los relacionados con una alimentación sostenible y saludable.
Los criterios generales de actuación de la Comisión Europea actualmente en vigor y que, como se ha mencionado, tienen carácter voluntario, se circunscriben a un listado de bienes, obras y servicios que se consideran prioritarios. 

Pese a que en el Senado no existe una guía de aplicación de los criterios generales de actuación de CPE de la Unión Europea, los órganos gestores de la Cámara han contemplado con frecuencia en los pliegos que instruyen los procedimientos de contratación, así como en los propios contratos, cláusulas tendentes a promover una adecuada conservación y protección medioambiental, incluyendo aspectos de carácter medioambiental dentro de los criterios de valoración de las ofertas o configurando como obligaciones especiales de ejecución del contrato el cumplimiento de estándares medioambientales.
A continuación se indican determinados criterios medioambientales seguidos por cada uno de los cinco órganos gestores responsables de la contratación de los bienes, servicios y obras prioritarios para la UE y se identifican las principales áreas de mejora:

1. Dirección Técnica de Infraestructuras

Servicios. Este órgano gestiona tanto contratos de servicios generales del edificio (limpieza y jardinería), como de mantenimiento de instalaciones. En ambos casos, además de las exigencias legales y reglamentarias, se vienen exigiendo prescripciones medioambientales de los productos utilizados para el desarrollo del servicio. Sin embargo, no se ha definido un procedimiento de acreditación de los mismos mediante la presentación de las ecoetiquetas o certificados equivalentes correspondientes.

  • Obras. En las obras de reforma, ampliación o mejora del Senado que gestiona la Dirección Técnica de Infraestructuras son de aplicación tanto los criterios relativos a la construcción de edificios de oficinas como los de iluminación interior, grifería, inodoros y urinarios, habida cuenta de que su adquisición se suele realizar mediante las correspondientes obras, con la salvedad de las lámparas de repuesto que instala la Unidad de Electricidad.

Como se ha mencionado en el primer apartado del presente plan, el análisis del ciclo de vida de las obras es una cuestión prioritaria en la Unión Europea como herramienta para mejorar el impacto ambiental de la edificación. Aunque tanto el análisis de ciclo de vida como las declaraciones ambientales de producto se usan habitualmente en el ámbito de la contratación pública de la Unión Europea para cuantificar el impacto potencial de una obra en el medio ambiente, no está generalizado el uso de estos datos para la toma de decisiones con respecto a la selección de productos o proveedores determinados. La incorporación del análisis del ciclo de vida en la contratación pública del Senado presenta ciertas dificultades inherentes a su complejidad técnica, así como las derivadas de una limitada penetración en el sector empresarial, dado el esfuerzo en tiempo y recursos que se requiere, lo que, dependiendo del alcance de la obra, podría suponer una limitación al principio general de contratación de igualdad de trato y no discriminación.

  • Suministros. Siguiendo el criterio de las prestaciones prioritarias establecidas por la Comisión, la Dirección Técnica de Infraestructuras gestiona únicamente los contratos de suministro de electricidad y contratos menores de repuestos de iluminación, en los que siempre se utiliza el criterio de mayor eficiencia. Con respecto al suministro de electricidad, desde el 1 de enero de 2016, los edificios del Senado se abastecen en su totalidad con energía eléctrica cien por cien renovable, en los términos establecidos en la Directiva 2009/28/CE del Parlamento Europeo y del Consejo de 23 de abril de 2009 relativa al fomento del uso de energía procedente de fuentes renovables y en la Circular 1/2018, de 18 de abril, de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, por la que se regula la gestión del sistema de garantía de origen de la electricidad procedente de fuentes de energía renovables y de cogeneración de alta eficiencia.
2. Dirección de Tecnologías de la Información y de las Comunicaciones

Los contratos de suministro relativos a los ordenadores y monitores y equipos de impresión gestionados por esta Dirección han incorporado criterios de contratación pública ecológica, tales como la exigencia de un etiquetado ecológico determinado que garantiza la baja incidencia ambiental de estos productos. En relación con los equipos de impresión, la Mesa de la Cámara, a propuesta de la Dirección de Tecnologías de la Información y de las Comunicaciones, en su reunión del día 5 de abril de 2016, acordó criterios de racionalización del número de equipos, que sirvieron de base para la contratación de su suministro en régimen de arrendamiento.
Los criterios de la Comisión Europea relativos al Centro de Proceso de Datos y servicios en la nube han sido publicados en 2020, por lo que no se han podido tener en cuenta en las licitaciones realizadas hasta la fecha. No obstante, se han incorporado criterios medioambientales en las contrataciones en este ámbito, tales como la utilización de equipos de alta eficiencia energética o la adquisición de tecnologías de virtualización de servidores y de servicios en la nube.

3. Dirección de Presupuestos y Contratación

Servicios. Este órgano gestiona el servicio de restauración, en el que se han seguido algunos criterios ecológicos, tales como el uso de cuberterías, vajillas, cristalería y mantelería reutilizables o la compra de productos de temporada. Resulta conveniente que cuestiones tales como mejoras en el tratamiento de los residuos sean objeto de especial consideración.

  • Suministros. Se han incorporado criterios ecológicos en los contratos de suministro, en especial en el relativo al mobiliario y al papel de impresión. El mobiliario utiliza materiales elaborados parcialmente a partir de productos reciclados o renovables (como la madera procedente de bosques de gestión sostenible) y su embalaje es reciclable o reutilizable. El papel de impresión cuenta con certificado de gestión forestal sostenible, no utiliza cloro como blanqueante y tiene un contenido determinado de papel reciclado.
4. Dirección de Recursos Humanos y Gobierno Interior

Este órgano gestiona las prestaciones de transporte por carretera a través de dos contratos: servicios de transporte en taxi y suministro de arrendamiento de vehículos. Respecto al primero se ha valorado el porcentaje de vehículos con la etiqueta medioambiental cero emisiones o eco. En relación con el segundo, se ha exigido una clasificación eco o cero emisiones de los vehículos y un sistema de gestión medioambiental para su mantenimiento; asimismo, se ha valorado la presencia de sistemas que ayudan a un menor consumo de combustible.

5. Dirección de Relaciones Institucionales - Tienda del Senado 

La Tienda del Senado viene contratando diversos suministros sostenibles y respetuosos con el medio ambiente desde antaño. De esta forma, se han sustituido algunos productos de venta por equivalentes más sostenibles y se ha eliminado el uso de plástico en las bolsas y empaquetados. Asimismo, los productos se suelen contratar con proveedores locales para reducir el impacto ambiental asociado al transporte de mercancías.
En las adquisiciones de la Tienda del Senado también podrían ser de aplicación los criterios ecológicos de contratación de la Comisión Europea relativos a los productos textiles, tales como la adquisición de productos textiles de producción ecológica, productos que contengan fibras recicladas o la exigencia de algún tipo de etiquetado ecológico.

Objetivo y medidas

El objetivo de este apartado es la inclusión de cláusulas medioambientales en la contratación pública de la Cámara con respeto, en todo caso, a los principios de eficiencia en el gasto, igualdad de trato, no discriminación, transparencia y proporcionalidad. Para la consecución de este objetivo se llevarán a cabo las siguientes medidas: 

  1. Se elaborará una guía de criterios generales de actuación (criterios de adjudicación, especificaciones técnicas y condiciones especiales de ejecución) de acuerdo con los criterios que establezcan las instituciones europeas y el legislador nacional en materia de contratación pública ecológica de los bienes, obras y servicios que se consideran prioritarios.
  2. Se revisarán los pliegos de contratación de servicios o suministros periódicos tanto para su adaptación a los criterios de contratación pública ecológica, como para la incorporación de las medidas propuestas en los distintos apartados del presente plan.
  3. Se establecerá un procedimiento para la verificación del cumplimiento de los criterios ecológicos en la fase preparatoria de los contratos de bienes, obras y servicios prioritarios en el ámbito de la contratación pública ecológica.
  4. Se realizarán actividades de formación y orientación dirigidas al personal responsable de la preparación de los pliegos y de la supervisión de la ejecución de los contratos.
  5. Se elaborará un Código de buenas prácticas ambientales para los contratos de mantenimiento y las obras menores y se establecerá un procedimiento para su aplicación y supervisión.
  6. Se incluirán los criterios de contratación pública ecológica y de sostenibilidad recogidos en el presente plan en todos los proyectos de obra de reforma, modernización, ampliación o mejora y se establecerá un protocolo para su aplicación.
  7. Los proyectos de obra nueva, en particular la obra que se realizará en el conjunto inmobiliario adquirido para la ampliación del Senado, se certificarán con el sello de sostenibilidad BREEAM, VERDE o equivalente con una calificación sobre su grado de sostenibilidad de excelente o similar.
  8. Se realizará un seguimiento periódico de las actualizaciones de la normativa europea y nacional en materia de contratación pública ecológica y se estudiará formar parte de la futura iniciativa "Compradores públicos por el Clima y el Medio Ambiente" que promoverá la Comisión Europea. 

C. COMPROMISO SOCIAL

El Senado participa y se compromete con los retos de la sostenibilidad y la extensión de la cultura y concienciación ambiental. Las prácticas sostenibles propuestas en el presente plan pueden tener un valor ejemplarizante y de sensibilización tanto para el personal de la Cámara como para la sociedad en su conjunto, tanto en el ámbito nacional como internacional.
Con el objeto de poner en valor este compromiso social del Senado con la sostenibilidad y la transición ecológica se proponen las siguientes medidas:

  1. Se definirá un plan de comunicación para la difusión del presente plan.
  2. Se creará un portal de sostenibilidad en la web del Senado, donde se dará publicidad al plan aprobado y a los principales objetivos, indicadores y medidas adoptados.
  3. Se creará un espacio específico en la intranet del Senado donde el personal de la Cámara pueda hacer sus aportaciones, sugerencias o reportar incidencias en el ámbito de la sostenibilidad.
  4. Se redactará una guía de usuario del edificio destinado a todo el personal del Senado que deberá, en todo caso, describir la estrategia sostenible del edificio y el cometido del personal para cumplir los objetivos medioambientales.
  5. Se impartirá formación, presencial u online, sobre el uso del edificio y concienciación medioambiental en las materias de eficiencia energética, ahorro de agua, economía circular y sostenibilidad en el transporte.
  6. Se propondrán actividades de sensibilización ambiental en las materias de eficiencia energética, ahorro de agua, economía circular y sostenibilidad en el transporte.
  7.  El personal competente en materia de sostenibilidad ambiental de la Secretaría General participará en foros nacionales o internacionales de intercambio de información y de prácticas ambientales, tales como la "Red de Intercambio Ambiental" de los parlamentos nacionales de la Unión Europea.

D. IMPLANTACIÓN, SEGUIMIENTO Y EVALUACIÓN

La definición e impulso de las medidas contempladas en este plan, dirigidas a avanzar en los objetivos relacionados con la utilización responsable y eficiente de los recursos y la reducción del impacto medioambiental de los edificios del Senado, así como en la contratación pública ecológica de la Cámara, hacen conveniente la implicación del órgano rector de la misma.
Asimismo, el diálogo, la cooperación y la corresponsabilidad de todo el personal de la Cámara se consideran indispensables para la implantación, mantenimiento y desarrollo de las medidas y el cumplimiento de los objetivos.
Durante la vigencia del Plan Estratégico de Gestión Sostenible se irán realizando las acciones programadas, así como los informes anuales de seguimiento. Con carácter previo a la elaboración de un nuevo Plan Estratégico de Gestión Sostenible del Senado, se realizará una evaluación final.
En aplicación del principio de transparencia, el Plan Estratégico de Gestión Sostenible, una vez aprobado por la Mesa del Senado, se publicará en el Boletín Oficial de las Cortes Generales y en la página web del Senado. Asimismo, los informes de seguimiento anuales y la evaluación final serán difundidos a través de las páginas web e intranet de la Cámara.

Implantación

La implantación consistirá en la ejecución de cada una de las medidas que contiene este Plan. Para ello será preciso identificar las necesidades para la consecución de los objetivos marcados y definir los procedimientos necesarios.
La Dirección Técnica de Infraestructuras de la Secretaría General del Senado, junto con la Comisión de seguimiento, propondrán un calendario de implantación, que será actualizado con ocasión de la elaboración de los informes anuales. Si en alguna fase de la implantación del plan se detectara la necesidad, se podrá proponer la contratación de asistencia técnica especializada.
Con el objeto de hacer efectivas las medidas recogidas en el presente Plan, podrán crearse Grupos de Trabajo en los que participarán las unidades administrativas que tengan competencia en la gestión de la medida a desarrollar.

Seguimiento

El seguimiento es el proceso que comprende la actualización y el análisis continuado de la información necesaria para verificar el cumplimiento efectivo de las acciones y de los objetivos propuestos, detectar áreas de mejora y proceder a los reajustes oportunos en la planificación.
La Dirección Técnica de Infraestructuras de la Secretaría General definirá indicadores de gestión para cada una de las medidas con el objeto de facilitar el seguimiento de la ejecución del presente plan.
Se crea una Comisión de seguimiento de la implantación del I Plan Estratégico de Gestión Sostenible del Senado integrado por dos miembros de la Mesa del Senado, la Secretaria General Adjunta para Asuntos Administrativos, la Directora de Recursos Humanos y Gobierno Interior, el Director de Presupuestos y Contratación, el Director Técnico de Infraestructuras y los Jefes de Departamento de la Dirección Técnica de Infraestructuras y el Director de Tecnologías de la Información y de las Comunicaciones.
Los miembros de la Comisión de seguimiento de la implantación del Plan Estratégico de Gestión Sostenible recibirán periódicamente información sobre el avance de los trabajos.

Informes anuales

Corresponde a la Dirección Técnica de Infraestructuras de la Secretaría General del Senado la preparación de los informes anuales que, una vez aprobados por la Comisión de seguimiento de la implantación del Plan Estratégico de Gestión Sostenible, serán sometidos a la consideración de la Mesa de la Cámara.
Los informes anuales del Plan Estratégico de Gestión Sostenible tendrán al menos los siguientes contenidos:

  • Análisis del proceso de implantación desarrollado y de los indicadores de impacto ambiental de cada una de las cinco categorías.
  • Comprobación de los resultados obtenidos, para conocer el grado de consecución de los objetivos y acciones definidos en el plan a través de la evaluación de los indicadores de seguimiento previstos.
  • Propuestas de adaptación para responder a nuevas necesidades o dar una mejor respuesta a las ya identificadas.

Con carácter previo a la aprobación de los informes anuales serán informados los representantes del personal y podrán formular observaciones y propuestas.

 

Evaluación final

La evaluación final se plasmará documentalmente y se realizará con carácter previo a la aprobación de un nuevo Plan Estratégico de Gestión Sostenible del Senado. La evaluación final permitirá conocer los avances logrados en materia de sostenibilidad ambiental, así como detectar aquellos aspectos que sería conveniente incluir en el nuevo plan.
Corresponde a la Dirección Técnica de Infraestructuras de la Secretaría General del Senado la preparación de la evaluación final que, una vez aprobada por la Comisión de seguimiento de la implantación del Plan Estratégico de Gestión Sostenible, será sometida a la consideración de la Mesa de la Cámara.
La evaluación final permitirá obtener conclusiones sobre los avances logrados en materia de sostenibilidad ambiental y sobre la idoneidad y eficacia de las acciones llevadas a cabo a lo largo de la vigencia del Plan Estratégico de Gestión Sostenible.
Los objetivos de la evaluación final del Plan Estratégico de Gestión Sostenible son los siguientes:

  • Conocer el grado de cumplimiento del Plan Estratégico de Gestión Sostenible a través de la evaluación tanto de los indicadores de impacto ambiental como los de gestión que se establecen en el plan para cada una de las medidas.
  • Analizar el desarrollo del proceso de implantación del Plan Estratégico de Gestión Sostenible y recabar datos actualizados sobre las medidas desarrolladas.
  • Valorar la adecuación de recursos, metodologías y procedimientos puestos en marcha durante la implantación del plan.
  • Identificar nuevas necesidades que requieran acciones para fomentar la sostenibilidad en el ámbito de la Cámara.
  • Establecer un nuevo diagnóstico en el que se permita comparar la situación final con la de partida, que será utilizado para la elaboración del nuevo plan.

Con carácter previo a la aprobación de la evaluación final serán informados los representantes del personal y podrán formular observaciones y propuestas.